Francis Bacon (1561 - 1626)
La Nueva Atlántida

Edición: eBooket . www.eBooket.net
Fonte: http://www.dominiopublico.gov.br/

INDEX

Introducción
Chegada a Bensalem
A Casa dos Estrangeiros
História de Bensalem
O rei Salomão
A Festa da Família
Moral e casamento
O mensageiro
O Colégio da Obra dos Seis Dias
Dos jardins e sua construção
Das obras da ciência
Os Mercadores de Luz

Nota: Os títulos do Index são nossos. TriploV

O Colégio da Obra dos Seis Dias

Tres días después el judío me buscó de nuevo y me anunció:

"Tienen ustedes suerte; al saber el padre de la Casa de Salomón que se hallan aquí, me envía para que les diga que los recibirá a todos y que mantendrá una entrevista privada con una persona elegida por ustedes; los cita para pasado mañana. Y como tiene intención de bendecirlos, lo hará por la mañana."

Fuimos el día y a la hora indicados, y fui yo el elegido para la entrevista privada. Lo encontramos en un bello aposento, ricamente tapizado y alfombrado hasta la plataforma misma. Estaba sentado en un trono bajo, muy bien adornado y le cubría la cabeza una rica tela bordada en satén azul. Únicamente le acompañaban dos pajes de honor, uno a cada lado, bellamente vestidos de blanco. La ropa de debajo era la misma que llevaba cuando lo vimos en la carroza, pero en lugar de la toga llevaba un manto con una esclavina, del mismo bello color negro, ceñida alrededor.

Al entrar, según se nos había indicado, nos inclinamos, y cuando estuvimos más cerca de su sillón se levantó y extendió su mano desnuda bendiciéndonos; volvimos a inclinarnos todos y besamos el borde de su vestido. Hecho esto los demás se fueron y yo permanecí con él. Despidió a los pajes, me invitó a sentarme a su lado y habló en español en los siguientes términos:

"Dios te bendiga, hijo mío; voy a hacerte partícipe de la joya más preciosa que poseo, pues por amor a Dios y a los hombres te haré una relación del verdadero estado de la Casa de Salomón. Hijo mío, con objeto de que la conozcas bien guardaré el orden siguiente. En primer lugar, te haré saber la finalidad de nuestra fundación. En segundo lugar, las posibilidades e instrumentos con que contamos para nuestros trabajos. En tercer lugar, los diversos empleos y funciones asignados a los colaboradores. Y por último, las ordenanzas y ritos que observamos.

"El fin de nuestra fundación es el conocimiento de las causas y movimientos secretos de las cosas, así como la ampliación de los límites del imperio humano para hacer posibles todas las cosas.

"Los dispositivos e instrumentos con que contamos son éstos. Tenemos grandes y profundas cuevas (le diversa extensión; las más profundas tienen seiscientas brazas, y algunas se hallan excavadas bajo grandes colinas y montañas; si se mide la profundidad de la colina y la de la cueva, algunas de ellas pasan de las tres millas. Creemos que es lo mismo la profundidad de una colina y de una cueva a partir de la parte llana; y ambas están igualmente lejos del sol, de las radiaciones celestes y del aire libre.

Llamamos a estas cuevas la región inferior, y las empleamos para realizar coagulaciones, endurecimientos, refrigeraciones y conservación de cuerpos. Del mismo modo, las usamos como imitación de minas naturales, y para producir también nuevos metales artificiales, mediante
composiciones y materiales que empleamos, y que permanecen allí durante muchos años. Utilizamos las cuevas también (por extraño que pueda parecer) para curar
enfermedades y para prolongar la vida de algunos ermitaños que eligieron vivir allí, provistos de todo lo necesario, e indudablemente viven largo tiempo; a través de ellos aprendemos también muchas cosas.

"Contamos con terrenos donde enterramos varias especies de cementos, como aquellos con que hacen sus porcelanas los chinos. Pero los tenemos en una variedad más extensa, y algunos de ellos son más bellos. Tenemos también una extensa variedad de tierras y abonos para hacer más fértil la tierra.

"Poseemos altas torres, la más elevada de media milla de altura, y algunas de ellas se asientan en elevadas montañas, de modo que la colina más elevada, con la torre en la cima, tiene por lo menos tres millas de altura. Y a estos lugares los llamamos la región superior, considerando el aire que existe entre los lugares altos y los bajos como la región media. Empleamos estas torres, según sus situaciones y alturas, para aislamiento, refrigeración y conservación de productos así como para la observación de fenómenos atmosféricos diversos: vientos, lluvia, nieve, granizo, etc. En ellas, en algunos puntos, existen viviendas de ermitaños, a quienes visitamos, a veces, y nos instruyen en lo que observan.

"Disponemos de grandes lagos, salados y frescos, en los que pescamos peces y cazamos aves. Los usamos también para enterrar determinados cuerpos naturales, pues encontramos que existe gran diferencia entre enterrar las cosas en la tierra, o en el aire de debajo de la tierra, y enterrarlas en el agua. Tenemos también lagunas de las que algunas personas extraen agua potable, dulce, y otras, mediante artificios convierten el agua dulce en salada.

Tenemos también rocas en medio del mar, y en algunas bahías de la costa, para efectuar trabajos en los que se necesita aire y vapor de agua del mar. Poseemos, igualmente, violentas corrientes y cataratas, que nos sirven
para producir muchos movimientos; también máquinas que aprovechando la fuerza del viento producen movimientos diversos.

"Tenemos también cierto número de pozos y fuentes artificiales, a imitación de manantiales y baños naturales, y que contienen en disolución vitriolo, sulfuro, acero, plomo, salitre y otros minerales; y además, poseemos pequeños pozos donde mezclamos muchas cosas, con lo que las aguas adquieren la virtud más de prisa y mejor que en vasijas o en estanques. Entre éstas tenemos un agua que llamamos Agua del Paraíso, remedio soberano. para conservar la salud y prolongar la vida.

"Tenemos también grandes y espaciosas casas, donde imitamos y hacemos demostraciones de fenómenos atmosféricos, como nieve, granizo, lluvia, caídas artificiales de cuerpos que no son agua, truenos, y relámpagos; igualmente, engendramos cuerpos en el aire, como ranas, moscas y otros diversos.

"Tenemos también ciertas cámaras, a las que denominamos cámaras de salud, donde preparamos el aire para que sea adecuado y bueno para la curación de diversas enfermedades, y para la conservación de la salud.

"Tenemos también grandes y magníficos baños, con mezclas diversas, para curar enfermedades y restablecer al
cuerpo humano del exceso de sequedad; y otros para aumentar la fuerza de los nervios, de las partes vitales, y de la substancia y jugo corporales.