Otros biógrafos de Beckett (Deirdre Bais, J. Knowlson ) hablan de la relación de amor y odio que él tuvo con su madre, de sus rupturas y abandonos: deja su familia, el colegio, Irlanda, vagabundea...
Por remordimiento regresa temporalmente, su madre muere, ella se negaba a leerlo y lo consideraba un fracasado Pero ninguno de los biógrafos hace referencia al padre.
En l934 y l935 se somete a un análisis con el psiquiatra londinense W.R. Bion. Se encuentra físicamente mal, tiene: " abcesos, forúnculos, uno de ellos en el ano, gripes, dolores articulares, ahogos, constipaciones, bloqueo urinario, punzadas en el bajo vientre, pesadillas e insomnios", estado que lo afecta moral y psíquicamente.
Beckett es consciente de que estos males son "la negación de la vida". Si no se le hubiera muerto el alma, le confiesa a su amigo Mc Greery, se emborracharía, soñaría despierto, vagabundearía. Según Anzieu, Beckett sabe que ese estado le ha generado "un pensar negativo generalizado" como consecuencia de "sus desórdenes psicosomáticos y de sus conductas aditivas y delictuosas". |