MIGRAR ES EL DESTINO de las palabras
Y es lo cierto que algunas resisten su suerte
dejando turbia toda frase
(ah silueta de hombre mudo
qué iba a ser un antónimo en esta residencia)
Migrar es también asunto de lo que miras
(siempre se habla de tal modo)
Qué hacer si al unísono se niegan
si imponen su santa compañía
(remedo de un vigía
estatuas de vieja sal)
Migrar es el verbo de la tierra
y todo lo que en ella parte
se persigna ante lo quieto
Cansado de su nombre
de las miradas que
se aferran a cada sílaba de su cuerpo
inventa el paisano otro verbo
Con un sabor a polvo en la garganta
despierta
en la otra punta del paisaje |