Las pantallas de las cadenas de Televisión Nacional, los Periódicos, revistas del Corazón, y medios de la Internet, dieron amplia cobertura y por largo periodo, a los mega espectáculos que dieron en Buenos Aires, las bandas internacionales de Rock, The Rolling Stone, y poco tiempo después, la más moderna, U-2, la primera liderada por el mítico Mike Jaegger, y la segunda por el cantante irlandés Bono: los espectáculos de resonancias épicas – fervor multitudinario -, se realizaron en enormes estadios de fútbol, River en el primer caso, y fue su organizador y empresario mítico del rock internacional, el tres décadas magos de las grandes finanzas del espectáculo, señor Daniel Grimbank.

En el primer caso, dado la trayectoria de la banda, la misma reunió a varias Generaciones – los históricos – y a los que se sumaban a la adoración de la agresiva personalidad del actor y show-man de sesenta y cuatro años, Mike Jaegger.

En el segundo caso primó una juventud glamorosa y no tan díscola, como la que presenció los espectáculos de los Stone.

BUENOS AIRES LA REINA DEL PLATA

Nadie se preocupe porque no es esta una crónica del Espectáculo, y si, una imaginistica reminiscencia, de aquellas épocas en que los gobiernos militares, dieron entrada masiva a los popes del rock internacional, merced a la tablilla potter del marqués, Martínez de Hoz : memoria acidulada, pero memoria al fin: en tanto, por eso de las circunstancias, Doña Mercedes Sosa, capitaneaba lo que se supone representativo de la música Argentina, hoy. Lo que realmente interesa aquí, no son los sucesos en sí, ni sus implicancias culturales en un país en estado de grave crisis reseciva, en todos los aspectos de la vida comunitaria – aumento de la inseguridad, crisis de la salud y de Educación, implosión de los sistemas representativos y jurídicos -, sino la alegre comedia, estupendamente representada, de espectáculos que,  se supone, propios de Londres, Berlín, Las Vegas, Los Ángeles y Nueva York, pero no se un país que vive bajo la amenaza de suspender el ciclo lectivo del año, incluido en éste panorama, la Capital Federal: los precios de las entradas para escuchar la voz del señor Bono oscilaban entre los $ 170 u $ 200, lo que equivale, casi a lo que perciben aquellos Desocupados adorados por planes asistencialistas y los sub.-ocupados, de ciertas administraciones del “interior del país”: todos los demás sucesos, graves o no, con incidencias o no en la calidad cada día más deteriorada (ya inexistente) Institucional de un Estado que está realizando el sueño de la Democracia más autoritaria que haya conocido la historia del país: un pueblo (demos) sin (cracia)  gobierno, pero con una voluntad dominante que marca el rumbo de su destino histórico.

ADONDE ESTA EL PODER FINANCIERO

Lo único que queda claro hoy, es que quienes asistieron, con esfuerzo o no, a los megos espectáculos que entretuvieron la atención, de quienes están alejados de aquella realidad, virtual para un correntino o un formoseño, es que el territorio nacional ha sido diseñado para el consumo económico del diez por ciento de una población alienada en los grandes productos que siguen viniendo de los mercados de habla inglesa, porqué la el marketing de este teatro de sombras chinescas, les sigue perteneciendo , así, como el consumo que las elites de los países marginados son sus consumidores obedientes.

Esto demuestra que toda discusión sobre la distribución de la renta en nuestro país, constituye solo la danza de una retórica propia de engañabobos, habida cuenta de lo que percibe hoy un profesor universitario en nuestra provincia.

CULTURA Y NACION

Si una nación se construye sobre la cultura ( sistema de relaciones sociales y productivas, imágenes de mundo, proyección creativa en todos los planos del saber). Debemos concluir pues, tristemente una vez más, que en nuestro país las fuerzas creadoras de su imaginario cognitivo han sido condenadas y que solo resta el consumo que impone una nueva división del trabajo y las nuevas formas de alienación que propaga el sistema: la mendicación carece de importancia, solo el consumo de los productos de “shopping”, tienen en éste momento realidad y por supuesto, los video “games” – juegos-  que permiten el doble olvido, el olvido del olvido de todas las carencias que puedan afectar la condición de ciudadano o de hombre, en una situación:  determinada, ésta que aquí vivimos, en éste momento, ya sin retroceso que pueda enmendar lo que ya es un pasado.

Oscar Portela
Ctes, marzo 2006.
Argentina.