En  realidad el manifiesto parece trascripto de algún papiro de la época de Ramses II. Los valores que cultivan  son “virtudes” propias de yuppies del mercado. Falta una cosa: ser asesino serial pero impotente como Ralph Finnes en “Dragón Rojo”.

El vértigo, el suicidio, la drogadicción, el travestismo, la tortura, la prostitución, la pedofilia, la necrofilia, la zoofilia ( a lo Woody Allen) ,  el vampirismo, la clonación de seres malévolos, son estereotipos que vienen siendo practicados desde que el hombre enterró al hombre.

¿ Eyacular? Con un poco de viagra basta. Todo maní encuentra su mono. Lo difícil es comenzar de nuevo. ¿Dónde el agujero del mate? ¿Por qué no caminar con la cabeza y dominar el mundo con los pies? .

Yo les propongo la antiquísima cualidad del “ideal ascético” –somos culpables luego merecemos el infierno- y la santidad llegará a vosotros en forma de “estigmas”. Seréis entonces los estigmatizados de la sociedad, los Robinsón que deben inventar un nuevo lenguaje – menos complejo que el esperanto – y de noche el chaman de la tribu os aterrorizará con cuentos acerca de lo que sucede con los “apartaditos”.

Mientras en las calles de las grandes urbes se filman pornos con escenas de niños violados a lo Nerón, el terror inundará vuestras almas puras y os elevareis en el aire en lugar de caer al precipicio. Y desde abajo vendrán apresurados a salvaros del sortilegio del bien.

Cierto: Os merecéis un exorcismo de parte de Lope de Aguirre y de su cólera – sus inefables peleas con Dios emulan las de Lutero con el Demonio- y los “chicos malos que solo buscan un porro, Eyacular, la vasta noche del no saber más que...., los aretes tribales, los tatuajes propiciados por Bradbury, los zombis el día del mal que es el bien invertido, será el condigno castigo para vuestro nuevo estado de pureza" : ¡Que digo, de inocencia!

Donde está el mal, la traición,  las transgresiones que buscábamos os preguntareis y solo encontrareis en vuestro camino el regreso de vuestra santidad hacia la “otra”. La que hoy se vende utilitariamente en los mercados del mundo del verdadero terror.

Oscar Portela
1 de julio del 2006-
Corrientes Argentina