CÉSAR CANDO MENDOZA
(Equador)
CANTO CALLEJERO
Vedla: salió de casa airosa
con un manojo de poesía
y una piedra por rosa,
a enfrentar al policía.
Mira con qué destreza
iza la bandera de colores,
oye su canto que empieza
con un verso de flores.
Tiembla el servil soldado
al ver la mano activa,
el pañuelo colorado
y el aire de mujer altiva.
Es la madre de esta era,
la que rechaza al tiranuelo,
la injerencia extranjera
en su destino y su suelo.
Es fulgor de una estrella,
la luz en la multitud cierta,
la consigna que en élla
es la Patria que despierta.
COTOPAXI
Oh
viejo agricultor que estás en los Andes,
santificado sea tu nombre:
tú, babero de luna;
tú, carnaval de serpentina;
tú, infinito beso de luciérnaga.
Hágase tu voluntad
en la línea equinoccial
como en las vecinas galaxias.
No nos dejes morir
sin ver tu rostro de carcajada
y
tu danza de fuego.
Oh
viejo agricultor que estás en los Andes,
santificado sea tu nombre:
tú, ojo de llamingo;
tú, huracán de sombreros;
tú, fumarola de mis antepasados.
Oh
bisabuelo,
fumador de siglos,
acógenos en tus manos
ahora y siempre
de los siglos, amémonos.
FOTOGRAFÍA
estás de poesía
de libre verso tu mirada
recién despierta
eres la menuda lluvia
que me susurra quedo
en la ventana
yo por acá de soneto
tú por allá de Itchimbía
cuento las canicas
de las deshoras sin ti
tú allá finges descabezar
un sueño que no alcanzas
yo ebrio de lunes
sin un centavo de luna
quiero brindar contigo
un trago de saudade
CÉSAR CANDO MENDOZA