CARLOS BARBARITO

Ante su frío, el ausente

POLEAS QUE BAJAN MATERIA
Y SUBEN CENIZA

Un hueco en la pared.

Lo atravieso.

Del otro lado, sombra

de gato sin gato,

beso de mujer sin mujer

ni boca. Y por la sombra, tal vez el mar

y por el mar, tal vez el cometa

y por el cometa,

tal vez leche, racimos, trigo y plata,

vitriolo, Giorgione.

Es la espera, entonces.

La mía, la de mis dedos

por entre los que todavía

no pasó el agua.

La de la tierra,

a la que ningún perro

todavía escarbó

para dejar allí su hueso.